Casado telefoneó a Sánchez el domingo pero no le cogió ni le devolvió la llamada
El líder del PP, Pablo Casado, telefoneó al presidente socialista tras conocer los resultados del 10-N. Sánchez no le cogió y, horas después, le envió un mensaje 'de cortesía', sin emplazarle a ninguna reunión
El presidente en funciones y candidato del PSOE prometió, antes del 10-N, ofrecer, en el plazo de 48 horas tras las elecciones, una propuesta a cada fuerza con el objetivo de formar, en el plazo de un mes, un Gobierno «progresista, unido y coherente» en los grandes temas nacionales y que no dependiente «de los votos independentistas». El principio de acuerdo firmado este martes entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias deja en evidencia la promesa incumplida del socialista. Una circunstancia que ha provocado malestar en el PP, donde se esperaba, al menos, la llamada del líder del PSOE.
Fuentes de la dirección ‘popular’ aseguran que, la misma noche electoral y conocidos los resultados, Pablo Casado telefoneó a Sánchez. El dirigente socialista no cogió el teléfono, y tampoco devolvió la llamada. El lunes le contestó con un simple mensaje de ‘cortesía’-de «acuse de recibo»- por WhatsApp y sin ningún emplazamiento a citarse en La Moncloa.
La percepción en filas del PP de que Sánchez tenía ya entonces perfilado su acuerdo con Podemos se confirmó este martes, con el anuncio de un pacto de gobierno con el partido de Pablo Iglesias.
Desde el domingo, Casado venía insistiendo en que su partido no apoyaría a Sánchez y le urgía a asumir responsabilidades para desbloquear la investidura, como apartarse para favorecer la gobernabilidad. Sin embargo, en fuentes ‘populares’ no explican la causa del malestar por saberse ‘ninguneados’ de cara a unas posibles negociaciones. Tampoco aclaran si, en esa eventual negociación, habrían facilitado, de algún modo, la formación de un Ejecutivo que no dependiese de Podemos ni de las fuerzas independentistas.
El líder del PP aseveró este martes -conocido el acuerdo- que Sánchez ha cerrado la puerta a «cualquier colaboración» con los ‘populares’, porque ha elegido «radicalizar» el Gobierno.
En una declaración sin preguntas tras el Comité Ejecutivo Nacional del PP, Casado ha asegurado que su partido realizará una «oposición rotunda» y que si se constituye este nuevo gobierno «y no va bien» el PP «está con los españoles para representar una alternativa alejada de extremismos, independentistas y radicales».
Casado ha acusado a Sánchez de ser «el tapón» para los pactos y de no representar al PSOE histórico, que ha calificado de «sensato» y que ha considerado urgente «que vuelva».